3er Encuentro Nacional de Interpretación
MARCO, Monterrey
Esta edición del Encuentro Nacional de Interpretación, convocado por la Dirección General de Artes Visuales de la UNAM y el Museo de Arte Contemporáneo de Monterrey, versó en torno a los vínculos entre la educación y los museos. Así como sucede en muchísimos museos en otros países, en México ya se está trabajando de manera seria e intencionada en programas educativos vanguardistas, que buscan regresar la atención del público hacia las formas de ver, de interpretar, de experimentar y disfrutar estos recintos.
Daniel Castro, músico, maestro, educador y director de dos museos en Bogotá, la Casa Museo Quinta de Bolivar y el Museo de la Independencia, dijo en su conferencia: "La discusión ya no está centrada en los límites de la interpretación, sino en las posibilidades de la experiencia". Lo traduzco de la siguiente forma: en los museos interesa lo que le sucede al público en las salas, cómo se mueve, qué siente, y no sólo lo que está colgado de las paredes.
En este sentido, los museos se consideran como constructores de significados. Al contrario de lo que sucede en muchos museos, que tienen la única misión de preservar un patrimonio, esos que abren sus puertas esperando que la gente no se acerque, que no entren las turbas por miedo a que maltraten las obras; al contrario, pues, de esos espacios, la nueva generación de museos permiten de verdad un acercamiento del acervo al público, a fin de que se establezcan verdaderas experiencias de aprendizaje.
¿Recuerdan a los chicos de secundaria o preparatoria con sus cuadernos, apuntando todo lo que está escrito en las cédulas para que el maestro creyera que habían aprendido algo de su visita al museo? Equivale a aquellos que mandan al teatro obligatoriamente y entregan el programa de mano con el boleto engrapado, a cambio de una calificación. La gente se ha alejado de los recintos para refugiarse en otras atracciones, menos demandantes.
Retomo aquí a Fernando Bercebal, director de la escuela de pedagogía teatral Ñaque, de Ciudad Real, cuando afirma que en las aulas se debe acudir al Drama, a la acción, a lo que puede suceder en los individuos, en los grupos. Así, en los museos importa lo que el público hace con lo que observa, con lo que escucha, con lo que percibe del acervo del museo. La experiencia del público se convierte en el punto de partida para que los curadores, educadores, museógrafos, museólogos, guías y demás trabajadores del museo puedan considerarse constructores de significados al servicio de la cultura. El museo debe convertirse en un espacio dramático, protagonizado por una parte por la gente que acciona en las salas de una manera orgánica o deliberada, y por otro, por los significados que se construyen a partir del acervo, sea un museo de arte, de ciencias, de historia, etc.
Otro tema que me parece fundamental retomar es el concepto que nos transmitió George Heine, profesor emérito de la Universidad de Lesley, acerca de la Educación Progresiva, cuyos fundamentos están basados en el trabajo de dos educadoras norteamericanas: Anna Billings Gallup (1872-1956) y Louise Connolly (1862-1927). Si educamos pensando en la sociedad actual, simplemente educamos, pero si lo hacemos pensando en la sociedad que les va a tocar a nuestros alumnos, estamos educando progresivamente. Cito a Gallup, mediante un texto que nos proporcionó Heine: "Así el niño copie el rótulo de la exhibición, lea una cita apropiada, converse de lo que ha visto con sus compañeros, disponga de una hora en la biblioteca, o escuche a la educadora en el museo, quien responde a sus preguntas, importa muy poco en tanto que el efecto de la visita produzca un amor por las mejores cosas de la vida".
Brooklyn Childrens Museum
En muchos museos se está experimentando con el teatro como un recurso para la construcción de significados. Pero hay que ir más allá, haciendo del teatro no una herramienta, sino considerarlo como un lenguaje que permita un nuevo diálogo del espacio con el público.
En el próximo Encuentro, a realizarse en Zacatecas, se tiene la intención de abordar el tema del Teatro en los Museos. Nos veremos allá.
En muchos museos se está experimentando con el teatro como un recurso para la construcción de significados. Pero hay que ir más allá, haciendo del teatro no una herramienta, sino considerarlo como un lenguaje que permita un nuevo diálogo del espacio con el público.
En el próximo Encuentro, a realizarse en Zacatecas, se tiene la intención de abordar el tema del Teatro en los Museos. Nos veremos allá.